Intento, sobre todo, sacar el portero que cada uno lleva dentro.
Conseguir la mejora y el progreso individual de cada uno, detectando y corrigiendo los distintos errores que tengan.
Y dependiendo de las habilidades de cada portero, establecer distintos ejercicios.
Diferenciamos a los chicos en dos grupos por edades.
Con los más pequeños intento trabajar más la técnica, que empiecen a blocar el balón, el posicionamiento en la portería…
Con los mayores, todo lo anterior lo tienen más inculcado y más trabajado, y hacemos ejercicios más potentes con el propósito de que sean futuros porteros del Caspe.
Todo transmitido como si estuvieran jugando en un partido.